(Spoilers) 5 cosas que ODIO y 5 que AMO de 'El despertar de la Fuerza'

Diez años después de lo que parecía el enterramiento de la saga y tres desde que Disney compró Lucasfilm y decretó que había que barnizarla con la máquina de imprimir billetes de Mickey hasta sacar 6 películas más, por fin ha llegado a nuestras pantallas la séptima entrega de las aventuras intergalácticas más queridas por todos.

Soy consciente de que por mucho que sea denostada una película, nadie soporta a los haters, por lo que para evitar ese efecto escribiré primero lo que me ha disgustado y en segundo lugar lo que me ha convencido de esta nueva entrega de 'Star Wars'.





Lo que no puedo soportar:

1- Excesivos homenajes: "Ayúdame Obi-Wan Kenobi, eres mi única esperanza". Esta frase es lo único que le falta al inicio de la película para ser un calco del episodio IV. BB-8 es R2-D2 que sirve de puente para la unión de los protagonistas (que afortunadamente todos pasaban por allí). Por mucho que repitan el nombre de "Jakku", ese planeta desértico y hostil es Tatooine. Y la lista continúa.


2- El sable láser de Anakin: La Excálibur de la Guerra de las Galaxias es la espada más reconocible de este particular universo. Tiene una forma única, yo mismo aún conservo la mía que se ilumina de color azul guardada en el sótano de mi casa para, quién sabe, pasarla a nuevas manos algún día como el viejo Ben se la entregó a Luke. Pues bien, si no recuerdo mal, la última vez que había sido vista fue cuando el aún iniciado Skywalker pierde la mano ante su padre y se precipita en una caída libre casi infinita. Ahora ha reaparecido (y con el poder añadido de la reminiscencia) en un garito de mala muerte y, cuando le preguntan a su poseedora cómo lo consiguió, ella... nos dice que esperemos a la próxima entrega.

3- El tamaño no importa: De las pocas críticas que se atreven a hacer a una de las cintas más míticas de siempre, 'Una nueva esperanza', es que el final de la Estrella de la Muerte no termina de convencer. Por si fuera poco, este fallo lo repiten en 'El retorno del Jedi'. Pues puestos a homenajear hasta el borde del remake, en el episodio VII desarrollan algo así como "el planeta de la muerte", el cual es neutralizado, cómo no, del mismo modo que las anteriores.

4- Ben se queda Solo: Utilizo este subtítulo por si algún despistado ha entrado a ver este contenido no destriparle el mayor spoiler de la peli. Si ya de por sí que el hijo de Leia y Han se pase al lado oscuro me parece de un morbo alejado de la trilogía original y más bien cercano a un fan-made trasnochado, la atmósfera de la escena en la que se da muerte a uno de los héroes (aquí el calificativo es innegable) más carismáticos de la historia del cine no hace ningún favor a su grandeza. Han se ha despedido de todos, ha cumplido su parte de la misión, tiene espectadores de lujo y se ha colocado en un escenario trágico ante su hijo desquiciado y con un arma letal. Sí, como todos podíamos intuir, es asesinado.


5- Aprender la Fuerza para dummies: Algo que creo que se había conseguido con gran éxito había sido darnos a entender que lograr el dominio de la Fuerza conllevaba años de entrenamiento, que si no eras prácitcamente un bebé podías ser demasiado mayor para empezar, y que incluso a veces necesitabas ser "El Elegido" para poder vencer a las adversidades. Pues bien, algo más se nos tiene que escapar si Kylo Ren, tras haber superado tan retorcidos requisitos, es humillado por una chatarrera y un Stormtrooper del montón.




Ahora vamos con lo que sí me ha gustado:

1- Rey, una nueva esperanza: Mucho antes de que lo políticamente correcto se adueñara del siglo XXI, un tal Hayao Miyazaki ya creaba protagonistas guerreras, fuertes e independientes, que aún así no tenían por qué perder su dulzura ni su lado femenino. Así fueron, por ejemplo, Nausicaä o Mononoke. Rey es de los mejores ejemplos de heroína "ghibliniana" de los últimos años, valiente y aventurera, a la que todos los públicos podrán admirar y respetar en las historias venideras.

2- Oscar Isaac está on fire: En la escena del rescate en la que Finn ayuda a escapar al rebelde hecho prisionero muchos se habrán dado cuenta de cuál de los dos se comía la pantalla con su interpretación. Y es que el actor que da vida a Poe Dameron es uno de los intérpretes más en forma de Hollywood. Ya demostró su talento en cine y series de culto recientes como 'A propósito de Llewyn Davis' o 'Show me a hero', y ahora se lo va a pasar en grande con super-producciones como 'Star Wars' o 'X-Men'. Que lo disfrute, se lo ha ganado.

3- Como manda la tradición: Al contrario de la opinión popular, creo que George Lucas realizó un intento acertado con la trilogía moderna (I, II y III), si bien no le salió del todo como esperado, cada una de las tres cintas supo ofrecer algo que trascendiera a la memoria colectiva (la carrera de vainas, la lucha en el sistema Mustafar...). Sin embargo, la historia del Imperio y los Rebeldes, del Halcón Milenario y de los jedis relegados tiene su "nosequé" que nos llama más la atención, y J.J. Abrams acertó tomando el único rumbo posible: seguir hacia adelante.

4- El destino de Luke: El gran misterio cobra sentido, y es quizás la parte argumental que más me ha encandilado. Luke Skywalker, un genuino héroe, se ha convertido en leyenda y es el Dorado al que buscan acceder recelosamente todos los personajes. Y al finalizar, con el tema de John Williams y la Orquesta sinfónica de Londres de fondo, la misma que aquella vez que pareció inspirar a un joven sin futuro entre las dunas de Tatooine mientras suspiraba al ver que la puesta de Sol binario huía en busca de un lugar mejor, el mito se convierte en realidad.

5- 'Star Wars' siempre ha sido y siempre será una proeza cinematográfica: No viví aquella época de guerras de Vietnam y escándalos de Watergate también conocida como "los años 70", pero sospecho que para el público medio ocioso de aquel entonces 'Star Wars' satisfizo lo que '2001: odisea del espacio' les dejó a medias, esto es, ser una aventura espacial cuyos efectos especiales se dirijan al entretenimiento y la diversión. Marcó un antes y un después en el cine comercial (con permiso de 'Tiburón'), abriendo una brecha entre dos tipos de cine que hoy en día está más abultada que nunca. 'La guerra de las galaxias' está en la cumbre de la cultura Pop, cultura de la que, nos guste o no, casi todos en Occidente formamos parte. Pero esto no debe hacer sentir culpable a nadie, es más, una infancia sin esta saga, así como sin otras como 'Indiana Jones' o 'Regreso al futuro', posiblemente sería una niñez menos soñadora de lo que el mundo puede ofrecer.

No tienes excusa para aburrirte estas Navidades ya que siempre puedes ir al cine: están echando la última de "Star Wars".